14 de junio de 2013

HACER EL MEMO


Cuento una idea, mientras tomamos una cervecita en la calle. Parece que la idea gusta, o al menos es bien recibida por la concurrencia. Uno del grupo dice:

–¡Oh, es una idea estupenda! ¿Cómo no se me había ocurrido A MÍ antes?

Después he intentado mantenerme sereno, mientras pensaba que tengo que aceptar la energía que proyecto.


.

No hay comentarios:

Publicar un comentario