OYE

Mira,

es como

muy sereno

todo esto

que te digo.

¿Ves

cómo

esa luz

que parecía

entristecida, siempre

nos ha dado pistas

de que volvería

a encenderse

para encendernos,

y no desfalleció

y nunca se apagó

del todo?

¿Ves

cómo

ese agua

que se nos escapó

entre los dedos,

la que lloramos

y no pudimos beber

y no pudimos

lavarnos, ves

cómo tan pequeña,

tan humilde tan

poquita cosa como el tañer

despreciado de la campana

de un pueblo sumergido olvidado,

ves cómo formó a nuestros pies

ese charquito tresgotas

que dio de comer

a un chícharo

pujante, inspirado

que creció ensortijado

hasta llamar a conciencia

con descaro a las mismísimas

puertas de las nubes, y decirles

qué onda y qué hay de lo nuestro,

hasta que cúmulos nimbos estratos

se avinieron a razones y anegaron

de alegría las simientes de los campos?

¿Ves

tú por qué

tan importantes

los zapatos

los mensajes

merendar

el deporte equilibrado?

¿Lo ves?

Es ya te digo,

como muy sereno

ese pincho

que me tienes

que me da

y me da,

y que te digo ay,

pero más adentro

me llega y en verdad

por dentro me sale,

la vida,

la vida,

es la vida, ves,

es la vida misma

que no se va

a morir nunca porque

se desvive por seguir

pinchando, para

que nada de lo suyo

se muera o se pierda

se entristezca

se salga de su sitio, oye.

Jag.

17_6_21

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